viernes, 25 de septiembre de 2015

Mis vías.

Y un viaje más me curte, murmullos imbéciles, cotillas, carentes de sustancia flotan. Silencios entrecortan la estupidez por cada sombra, por cada curva cerrada me agarroto. Por cada parada me desvelo. Y prosigo.
Un viaje más me aburre, me acerco al punto por el que parto rodeado de desconocidos y falsos parlantes con voces temblorosas por el traqueteo. Soles y sucias nebulosas se ciernen sobre mi momentos antes de desvanecerse. Instantes después me sepulta la ignorancia. ¿Que hago aqui? Vengo porque dejo mis raices. Estúpido atisbo de desdén el que corona mi llegada al horizonte más cercano. Ya no lo sostengo. Dejo caer el lápiz que me llenó de júbilo, que colapsó los pulmones de quienes nombran y renombra la letra de quien escribe. Suelto desesperado un amigo al que cambié por la sensación de haber llegado al destino.